Pastora Idaric
Pintora Muralista

Semblanza

Es amante de la belleza, la figura humana, la luz y el color, artista plástica muralista orgullosamente mexicana, de talla internacional con 25 años dedicada al arte pictórico. 

Su aportación ha sido de gran relevancia, ya que su legado ha contribuido a enriquecer el muralismo y con ello la historia de nuestro país. En cuyo haber sobresalen cuatro murales en el Recinto Legislativo sede del Congreso del Estado y su más reciente mural en la Secretaría de Turismo, entre otros. 

Sus creaciones embellecen los muros de las más exigentes solicitudes de sus coleccionistas. Su obra de caballete se encuentra en diversos países de América Latina, Estados Unidos y México. 

Actualmente realiza numerosas obras por encargo, se caracteriza por la suma calidad en grandes formatos, teniendo como prioridad el ímpetu libre y armonioso de aplicar toda una gama de colores en cada uno de sus lienzos. 

Pastora Idaric ha tenido la sensibilidad de dignificar el arte con una carrera sin limites en la expresión, llevando consigo su frase preferida: 

Obras de Arte gran formato figurativo

Permíteme crear un proyecto especial personalizado para tu gran obra de arte. Te sorprenderá la diversidad de ideas, ya que la atmósfera, dimensión, perspectiva, retrato y figura humana están entre mis temas predilectos. Mis años de experiencia en el ámbito artístico me han permitido desarrollar una excelente visión y sensibilidad al captar en base al contexto de tu idea; la creación de un proyecto personalizado inspirado en plasmar tu pintura para ese lugar especial.

Mis Talleres

"ANTES DE COMENZAR CON NUESTRA CLASE DE PINTURA REALIZAMOS UNA MEDITACIÓN" 

La meditación es una herramienta para conectar con nuestra energía creativa, nos permite mirar hacia nuestro interior enfocando nuestra atención en nosotros mismo; esos momentos que nos damos meditando son el enfoque central para conocernos, descubrir nuestro Gran Potencial, creando grandes cosas que nos causan Felicidad. 


Pastora Idaric

Prólogo 
Periodista Enrique Lazcano

El día en que me asomé a los ojos de Aurora Reyes, primera muralista mexicana; me asome a su historia, a su tiempo, y cómo diría Ortega y Gasset “a su circunstancia “ y después de hacerlo, no pude menos que rendirme ante su talento. 

Hoy como un relámpago de colores, redescubro la rebeldía de una artista plástica, que me asombra, que me lleva de la mano a recorrer la historia, haciéndome parte de ella. Hoy miro a los ojos de una pintora deslumbrante; quizá heredera de aquellos viejos pinceles de la maestra Reyes. Sin embargo, en el celoso mundo de la creación es un pincel que no se parece a ninguno, un trazo distinto, diferente, es la personalidad que encierra el arte creador de Pastora Idaric. Me asomo al balcón del tiempo y descubro cómo Pastora ha ido creciendo en talento y en estatura artística. Con paciencia, sabedora de que la excelencia lleva un tiempo preciso de maduración, la joven maestra, ha ido escalando en las paredes de sus lienzos y muros, hasta alcanzar estándares internacionales de calidad. Ella va creciendo, y su madurez como artista, se ve en sus propios trabajos. 

Pastora es dueña de su universo. De un mundo donde los habitantes pueden ser los héroes de la patria, sus volcanes, sus hombres y mujeres y también es capaz de remontar el vuelo creador, en las alas de un Pegaso. Sus obras, sus murales, nos arrojan sin permiso a un viaje a través de la historia con sus personajes, que retoman su vida, gracias al pincel de la autora. El soplo de vida, que nos regala su paleta policromática. Y ahí están los rostros del hoy, del ayer histórico, y acaso del futuro. Porque como en un juego de espejos, te adivinas en los rostros que viven en los muros, y en los lienzos de la artista. ¿Dónde vive la pasión de una artista? ¿acaso en su cabeza?, ¿en el corazón? ¿De dónde se nutre el talento? ¿de los pinceles heredados? ¿de los talentosos antepasados? !o es solo la conjunción de eso y más! 

Pastora Idaric refresca con su talento el territorio natural de su arte: ¡El mundo de la plástica! 

Este espacio universal donde viven y se crean las obras, ha sido interrumpido por una propuesta desafiante, la personalidad de la pintora, es un reflejo exacto de sus obras. Creación que conjuga la sensualidad, con el rigor y la métrica creadora. No hay capricho, hay instinto. 

En la mirada de Pastora, parecen transcurrir eventos del ayer, que como en cámara fotográfica, sus ojos capturan para encerrarlos en su lienzo, en muros de piedra o cemento, para condenarlos eternamente a la admiración. Pastora representa una apuesta renovada en el mundo del arte de nuestro país, es el ejemplo también de la mujer del siglo XXI, artista, madre, compañera, hija; ¿cómo describir esta personalidad? 

Pastora me recuerda a otro grande de la pintura, con su ensortijada cabellera, me lleva de la mano en el recuerdo, a la melena iracunda de Siqueiros. Tengo para mí, que a los artistas, hay que calificarlos por su tarea creadora . Si así fuera, yo diría de la maestra Idaric, que es un dínamo incansable, a la espera de nuevos retos, nuevos lienzos, nuevos muros! He tenido el privilegio de ser un espectador del crecimiento profesional de esta artista; he visto cómo ha logrado dominar la estética y la técnica; he sido testigo en mi calidad de periodista, de su crecimiento personal e intelectual.
Si tuviera por fuerza que definirla diría de ella : “Es la viva imagen del talento acompañado del esfuerzo” la maestra sabe que no basta estar dotado de talento; solo el trabajo comprometido logra alcanzar la cima. Joven desde la perspectiva cronológica, la carrera de Pastora depara un sinfín de sorpresas, cada cuadro, cada lienzo, cada historia, cada rostro se van sumando a la lista de obras realizadas. Hoy solo miramos como en un nuevo comienzo, al pincel de la artista que adivina una nueva madrugada, que te hará volar en la tela de un cuadro, como una paloma que escapa finalmente de una prisión, ¡para volar libre!, y así es el arte de esta Artista Plástica Mexicana, dotada de Maestría con una exactitud Mercurial en el sendero del Arte y de sus recompensas visuales. 

Heredamos lo que llevamos en la sangre, heredamos el talento, la mirada, el encuentro con la luz, heredamos la sensibilidad necesaria para la creación, heredamos la paciencia y la impaciencia de las virtudes artísticas, eso heredamos…, pero también habremos de heredar lo que nosotros hemos creado o conseguido en nuestros propios quehaceres. Ella, ha sido recipiendaria del talento almacenado en otras generaciones: Su bisabuelo Juan Cano Huitrón (pintor), su tío abuelo Fernando Cano Cardozo (escultor), su tío y maestro Juan Huitrón Lugo (pintor clásico realista), la sangre que alimenta el espíritu creador, viaja de generación en generación, obligando al artista a seguir el legado creativo. 

Pastora no se mira en espejos, ella se refleja en sus cuadros. Pastora no habita en casa, vive en las paredes de sus murales, Pastora no tiene rostro, el suyo es el rostro de las mujeres y los hombres del Anáhuac, que son los rostros de los protagonistas de episodios históricos de nuestra nación, o solo son también, los rostros reposados de quienes han posado para ella. Por ello, los artistas son inmortales, porque viven para siempre en sus obras, y Pastora tiene el corazón tierno de quien retrata con su pincel al Rey poeta Nezahualcóyotl “Amo el canto del Cenzontle, pájaro de cuatrocientas voces, ¡pero amo más a mi hermano el hombre!” ¡y también tiene el corazón de piedra que permite el no morir nunca! 

Para mí, es un privilegio y un regalo escribir “Un Algo” sobre Pastora Idaric, he admirado su trabajo desde que la conocí, he tenido el placer de entrevistarla, y atestiguar, (cómo en el proceso de maduración de las uvas), Pastora se supera a través del esfuerzo y el compromiso. Algo que me ha llamado la atención desde el mismo día que le conocí: es “su mirada”; siempre ha sido para mí, un misterio hacia dónde la dirige, es una mirada que atraviesa, puede ser que no te mire, puede ser que sus ojos no te vean fijamente, puede ser que su mano no te toque, no te ocupes… quizá sus ojos deseosos de crear su siguiente obra de arte, inspirados percibiendo, y su mano aferrando un pincel… ¡Si te Contemplen! 


Con el Arte en la Sangre

Hago un profundo reconocimiento con admiración en homenaje a mi legado artístico y familiar; quienes han sido pilares de inspiración con su trayectoria y sobre todo por heredarme la gran virtud del arte y la pintura.

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